jueves, 23 de agosto de 2012

Psico-neuro-inmuno-endocrinología (PNIE)


Leyendo la revista Galería del semanario uruguayo Búsqueda, encontré un artículo sobre ese tema, escrito por la periodista Ángeles Blanco que entrevistó a varios médicos egresados de la Universidad Favaloro de Buenos Aires con especialización en PNIE. De allí extraje conceptos que me resultaron muy interesantes y que deseo transmitirlos a mis lectores. 

Esta disciplina integradora es definida como una nueva visión de la medicina, de la enfermedad y del paciente. 

Se concibe al individuo de manera holística, es decir, como una unidad biológica, psicológica, social y espiritual, por lo tanto, todo lo que experimenta, piensa y siente influye en la red conformada por los sistemas psíquico, neurológico, inmunológico y endocrinológico. 

Estos sistemas están comunicados entre sí por diferentes sustancias, las hormonas, que transmiten información y permiten la interacción. 

Por ejemplo, en algún momento nos hemos enterado de que alguien, o nosotros mismos, padeció de un malestar durante un tiempo, y éste mejoró después de que cambió de casa o de empleo, porque dejó de tratar a alguien que le producía estrés. 

Además de estudiar la interrelación de los sistemas, también estudia su interacción con estímulos que cada individuo recibe de su entorno (del clima, de su vida sociocultural, de sus relaciones afectivas, familiares, laborales, de la alimentación, etc.). 

Todos estos factores diversos, en interacción con los factores genéticos, inciden en el origen de todas las enfermedades, pues todo repercute en el sistema nervioso, y en los aspectos inmunológicos y hormonales. 

Desde el surgimiento de la ciencia moderna, la mente y el cuerpo quedaron separados, pero desde el comienzo del psicoanálisis se vio la necesidad de entender al individuo como una unidad física, mental y emocional y la PNIE es como una culminación de estas preocupaciones. 

En Estados Unidos, la PNIE surgió en la década del 70 como consecuencia de los estudios del psicólogo Robert Ader y como antecedentes de la disciplina se encuentran las observaciones de Hans Selye en su Teoría del Estrés en la que menciona dos tipos de estrés: el agudo y el crónico. 

El estrés agudo hace que el individuo reaccione a un estímulo del momento (por ejemplo, una agresión), y el crónico es el que se va acumulando con el tiempo, formando como un sedimento y es nocivo. Este tipo de estrés produce consecuencias en el organismo porque disminuye la inmunidad y esto tiene relación directa con el cerebro, disminuye la actividad de los linfocitos y de determinadas sustancias que nos protegen quedando vulnerables a infecciones, a enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoidea, la esclerosis múltiples, el cáncer, etc. 

Algunas investigaciones científicas concluyen en que las situaciones de abuso y maltrato en la infancia generan una vulnerabilidad para responder ante el estrés, favoreciendo la manifestación de diferentes enfermedades. 

Teniendo en cuenta toda esta información, concluyo en que lo más aconsejable cuando tenemos que recurrir a un médico, es que éste esté especializado en esta disciplina que, lamentablemente, no se estudia en todas las facultades de medicina. 

Si bien la medicina moderna se concibe con equipos multidisciplinarios, el rol del paciente debe ser activo, pues todo tratamiento con PNIE implica un proceso de biopsicoeducación. 

El paciente debe entender que el mal que lo aqueja puede tener raíces profundas y el equipo médico debe detectarlas y atacarlas. 

El enfoque PNIE ayuda a mejorar la calidad de vida y colabora en la cura de enfermedades pero el tiempo, el esfuerzo y la voluntad del paciente son determinantes del éxito. 

Fuente: http://es.shvoong.com/medicine-and-health/1738630-psico-neuro-inmuno-endocrinolog%C3%ADa/#ixzz23FEfHdwE

Fuente: http://es.shvoong.com/medicine-and-health/1738630-psico-neuro-inmuno-endocrinolog%C3%ADa/#ixzz23FESKwDK